domingo, 3 de enero de 2016

T10: Escribir y publicar

A lo largo del presente texto, voy a comentar algunos de los aspectos más importantes del proceso que transcurre desde los pasos marcados a la hora de redactar un artículo científico al momento en que se publica. Todo ello desde la experiencia que me han proporcionado los años de formación en la disciplina histórica y los pocos meses de doctorado que han transcurrido desde que decidí tomar este camino.

Como ya se ha visto en entradas anteriores, hay que tener varias cuestiones claras a la hora de exponer nuestro trabajo mediante un texto escrito o una exposición oral. El estilo es importante, sobretodo en cuanto a que el mismo sea claro, conciso y no lleve a confusión. Hay que cuidar las cuestiones formales, ser coherente con el manejo de los tiempos verbales y dividir el texto en partes diferenciadas para que el lector pueda centrarse en lo que más le interese. En el caso de una exposición oral, debemos cuidar los detalles, intentar mantener la atención del oyente y dejar que recursos como el manejo de powerpoint sirvan de complemento sin que focalicen totalmente la atención. En mi caso, tanto desde el lado del oyente como de el del ponente, he observado como la selección de pocas ideas bien desarrolladas, en lugar de presentar muchos datos sin profundizar, ayuda a acercar mejor el tema. Además, el uso de muy poco texto en el powerpoint también es positivo, siendo este un soporte de imágenes, gráficas y enumeraciones.

Voviendo al texto escrito, una vez que tenemos el artículo acabado, comienza una de las partes más peliagudas. Se trata de elegir una publicación o revista apropiada y de que nuestra aportación sea aceptada. Llegados a este punto, es importante tener en cuenta los llamados índices de impacto, para saber qué publicaciones son relevantes en nuestra disciplina. En el caso de las ciencias sociales, se puede acudir a distintos indicadores online, dónde se muestran rankings y listas de las revistas más importantes según algunos criterios. Así, entre todos ellos, destacaría RESH, un sistema de valoración de las diferentes publicaciones españolas en ciencias sociales y Humanidades.

No siempre tendremos la oportunidad de publicar donde mejor nos convenga, por no decir que quizá la mayoría de las veces no lo consigamos. De ello dependen muchas cosas: la calidad de nuestra aportación, la lista de espera, las líneas temáticas de la revista, etc. Desgraciadamente, según mi poca experiencia, y gracias a los que otros profesionales más curtidos que yo me han contado, depende de a qué manos llegue nuestro trabajo y de la relación profesional que exista (de existir) entre el autor y el revisor. Al margen de la calidad del texto enviado, parece que se valora la procedencia institucional del mismo, el grupo de investigación al que pueda estar ligado, la trayectoria del autor, etc. Además, la situación económica influye muchísimo en el devenir de algunas publicaciones y, en consecuencia, en el futuro de nuestras aportaciones.

A pesar de los inconvenientes, hay que dar lo mejor de nosotros para conseguir que nuestros artículos caigan en las mejores manos. Y aunque el proceso "postredacción" sea complejo y decisivo, no hay que descuidar los pasos anteriores. Es más, es conveniente meditar muy bien un artículo antes de enviarlo a una revista: contenido, forma, título, abstract,... Todo es esencial.

2 comentarios:

  1. Pues nada, cuando te pongas a escribir (ya en breve, espero) tienes aquí una serie de consejos que recordar

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  2. Nunca está de más recordar las recomendaciones que realizas. Y gracias por la referencia al ranking.

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